El Narcoestado además de eliminar a sus opositores y a los Defensores de Derechos Humanos (DDH), emprende la criminalización de asociaciones de abogados y juristas que defienden a las víctimas, persecución por la que es llamado a juicio en la Corte Interamericana de DDHH (Cidh).
Categoría: Solución Política
El 10 de mayo la Comisión de la Verdad (CV) organizó el ‘Encuentro por la Verdad: Reconocimiento de responsabilidades sobre las ejecuciones en Bogotá y Soacha’, donde participaron las Madres de los Falsos Positivos de Soacha (Mafapo) y oficiales de las Brigadas 15 y 30 del Ejército.
Silenciar a Otoniel con la extradición, la verdad a medias de militares ante la JEP, la negación de Molano de la masacre de Putumayo y la negativa del Gobierno a asumir responsabilidades por la Masacre de Bojayá, demuestran que la élite dominante eterniza la impunidad para perpetuar la Guerra contra el pueblo.
La persecución del régimen contra sus opositores se mide en las estadísticas de violaciones de Derechos Humanos (DDHH), las que en 2021 fueron peores que antes debido al trato de Guerra que propina a la protesta social, por medio de sus Fuerzas Armadas (FFAA) y sus paramilitares.
“Si un pueblo sale a manifestarse en medio de una pandemia es porque su Gobierno es más peligroso que un virus”: apoyo al Paro Nacional del cantautor puertorriqueño René ‘Residente’; estallido social que parte en dos la historia colombiana y crece cada día su portentoso grito por los cambios.
El régimen mata Defensores de Derechos Humanos para abrir paso a la gran minería en la Amazonía, como dice Morcadei Ogada: “el amor de un extranjero por nuestra fauna suele darnos la medida de su odio por nuestros pueblos indígenas”.
La Guajira posee una inmensa reserva de carbón, cobre, petróleo y gas, además de condiciones eólicas para la generación de energía limpia; en trágico contraste su población sufre los mayores índices de Pobreza Multidimensional, Monetaria y Extrema del país.
Para instalar megaproyectos en el Pacífico los militares y paramilitares destierran a sus pobladores, estas tropas las engordan con el narcotráfico, la DEA dice que el 80 por ciento de la cocaína que llega a Estados Unidos (EEUU) sale por la costa del Pacífico.
Chocó por su extensa costa sobre el Pacífico desde la época de Pablo Escobar ha sido colonizado por los Carteles de la cocaína; militares y policías en colusión con los narcotraficantes destierran a los pobladores, para allanar el terreno a las empresas multinacionales.
EUU de la Brigada Sfab han creado los Comandos Contra el Narcotráfico y Amenazas Transnacionales, que despliegan y conducen en las fronteras, como la del Putumayo en donde acaban de perpetrar la masacre de 11 indígenas y campesinos.
Es tanto el cinismo de la dictadura mafiosa colombiana que en su propósito de “hacer trizas la paz”, se ha apoderado de las curules en la Cámara de Representantes, que estaba acordado que se asignarían a las víctimas del Conflicto no a los victimarios.
El Presidente Belisario Betancur (1982-1986) en agosto de 1984 firmó un Acuerdo de Diálogo y Tregua Bilateral con el EPL y el M19; en la tregua el régimen atacó y asesinó a los guerrilleros, entre ellos a Luis Fernando Lalinde, su madre Doña Fabiola por 30 años luchó hasta esclarecer este crimen.