a el Subsidio de Transporte, lo que ha producido múltiples protestas ciudadanas, como colarse masivamente en los autobuses, convocatoria hecha por organizaciones juveniles en un potente acto de desobediencia y resistencia a la opresión del régimen.
Categoría: Solución Política
naron el aumento del 10 por ciento del salario mínimo, sin embargo, la inflación, la incontenible devaluación del Peso y el aumento global de los combustibles destrozaron el famoso aumento, y los colombianos quedamos con menos poder adquisitivo que en años anteriores.
Uribe en medio del desprestigio cuestiona la Comisión de la Verdad, mientras el Fiscal derrocha el presupuesto, el Gobierno acelera la extradición de Otoniel, súper militariza a Arauca y sube el precio de los combustibles, que empeora el costo de la vida.
El 4 de enero el Ministro de Defensa ordenó la militarización de parte de la capital del país en el Portal de Las Américas, el Portal de Suba y la Ye de Yomasa en Usme, además amenazó con judicializar a quien preste ayuda a los manifestantes.
El 2021 fue otro año de Genocidio contra el pueblo, pero recrudecido contra las organizaciones sociales y políticas de la costa Pacífica, que en el reordenamiento territorial imperialista están destinadas a megaproyectos, por lo que necesitan desplazar su población.
El régimen a través del Congreso donde es mayoría crea leyes para restringir derechos civiles y constitucionales, a la vez que legaliza el paramilitarismo urbano, lo que demuestra cómo el Gobierno de Duque encabeza una Narcodictadura.
Algunos miembros de la Fuerzas Armadas (FFAA) a regañadientes han confesado que miles de ellos son responsables por ejecutar a millares de inocentes, Práctica Genocida que intentan justificar como “conducta omisiva”, cuando la realidad demuestra que se trata de una política de terror de Estado.
Durante décadas las Fuerzas Armadas (FFAA) colombianas se han caracterizado por dar trato de Guerra a las manifestaciones populares, y utilizar los entes de control del Estado para encubrir violaciones de Derechos Humanos y garantizar la impunidad.
enocidio contra Defensores de Derechos Humanos (DDH) y la oposición de izquierda, dejar de perseguir a los comunicadores sociales y respetar la libertad de expresión.
En el Gobierno de Álvaro Uribe se implementó la política de Seguridad Democrática, la cual desencadenó el asesinato de miles inocentes para ser mostrados como bajas en combate, lo que se denominó Falsos Positivos, Genocidio que continúa en el día de hoy.
Iglesias y organizaciones de Defensoras de Derechos Humanos (DDH) documentan las prácticas genocidas de agentes estatales y narcoparamilitares, contra las comunidades para abrir campo a megaproyectos mineros, de infraestructura y agronegocios, castigo que también aplican a los manifestantes del Paro Nacional.
La Doctrina de Seguridad categoriza el liderazgo social como Enemigo Interno, de esta manera el régimen justifica el ataque sistemático a las comunidades en colusión con los paramilitares para favorecer que las multinacionales se apropien de los territorios.