COLOMBIA DESIGNADO MANDADERO DE GUERRAS AJENAS

Hernando Martínez

Si no fuera por la Guerra enconada en Colombia y la agudización de la Guerra europea, la designación del país como ‘Socio Militar no Otan’ solo sería una ridiculez más, bajo este tercer Gobierno de Uribe, pero en las actuales circunstancias es ‘echarle leña al fuego’ de la muerte.

Biden el pasado 21 de abril avisó al Congreso su intención de “designar a Colombia como aliado militar estratégico fuera de la Otan”, decisión que forma parte del Plan de Guerra Perpetua del imperio norteamericano, en su contraofensiva para revertir el proyecto de unidad y soberanía democratizadora de Latinoamérica y el Caribe, que tuvo un importante impulso a partir de 2009 con el Golpe de Estado que Estados Unidos (EEUU) urdieron contra el Gobierno de Manuel Zelaya en Honduras.

En el Gobierno de Santos (2010-2018) mientras adelantaba la pacificación de una parte de la guerrilla colombiana y creaba una ficción de paz, en 2017 integraron a Colombia como Socio Global de la Otan, principal alianza bélica imperialista con la que sostienen la globalización capitalista neoliberal, la que ahora da un salto hacia una nueva fase de Guerra Fría.

Lo que nos cuesta este nombramiento

Esta designación al no ser un Acuerdo o Tratado, el Estado colombiano no participa en ninguna toma de decisión: “los aliados importantes extra Otan no tienen derecho a garantías de seguridad específicas como los miembros de la Otan en virtud del Artículo 5” [1], significa que si un adversario de la Otan ataca al país, la Otan no está obligada a defenderlo.

Vendrán nuevas deudas: “dichos aliados pueden recibir préstamos de material y suministros, servir de ubicación para los Arsenales de la Reserva de Guerra de EEUU y se le puede permitir comprar municiones de uranio empobrecido” [2], por tanto, ¿los EEUU qué tipo de armas depositarán en Colombia?, las tropas del régimen colombiano ¿contra quienes van a utilizar municiones cargadas con uranio empobrecido?, ¿los colombianos conocemos el daño que causan tales municiones?

Los voceros del régimen se vanaglorian con las “preferencias comerciales” que les dan en la compra de chatarra militar de EEUU: “el país designado puede ser destinatario prioritario de los excedentes de material de defensa de EEUU” [3].

Al almacenar Arsenales de la Reserva de Guerra de EEUU estacionarán tropas norteamericanas adicionales en territorio colombiano, diferentes a las que ya poseen en las Bases Militares gringas y a las últimas que enviaron de las Brigadas de Fuerzas Especiales de Seguridad (Sfab), ya que el Ministerio de Guerra estadounidense (Pentágono) no va a encargar a tropas colombianas el cuidado de este material bélico estratégico.

Otra vez nos arrastran como ‘carne de cañón’ de EEUU

Los EEUU primero designaron al régimen colombiano como Socio Global de la Otan y ahora lo nombran Aliado Militar por fuera de la Otan, con lo que le encarga la realización de parte de su estrategia de Guerra, ¿cómo va seguir desarrollando esta estrategia en el continente?, en igual forma a lo ocurrido hace 70 años durante la Guerra de Corea, ahora ¿enviarán tropas militares y paramilitares colombianas a pelear Guerras fuera del continente? 

Este doble amarre que le hacen a Colombia al carro de Guerra de EEUU y la Otan merece un debate nacional y continental, por significar una amenaza al propósito de la Celac de hacer de América Latina y el Caribe una Zona de Paz.