En el estallido social de este mes y medio han aparecido nuevas modalidades de lucha y formas organizativas populares, y se han fortalecido las que venían de jornadas anteriores, acá se reseñan las principales.
Categoría: Voz Elena
La Doctrina de Seguridad categoriza el liderazgo social y la manifestación popular como Enemigo Interno, de esta manera el régimen justifica el ataque sistemático contra la protesta social y enmascara sus violaciones sistemáticas de los Derechos Humanos (DDHH) durante el Paro Nacional.
Llueven críticas por cambios cosméticos a la Policía, piden a la Cidh que proteja la protesta social, cuando el Paro Nacional completa mes y medio llaman a proseguir la lucha por vida digna, denuncian el asesinato de Lucas Villa por la Fiscalía y el nombramiento de funcionarios mafiosos.
Para estigmatizarlos tachan de “vándalos” a los manifestantes que se defienden del trato de Guerra que reciben del régimen, acá en este relato histórico se pasa revista a la serie de actos vandálicos ejecutados por las clases dominantes contra el pueblo colombiano.
El neoliberalismo ha generado una crisis de civilización donde una de sus implicaciones es el incremento desmedido del costo de vida, esto a su vez lleva al empobrecimiento de la clase media y el incremento de la miseria, cataclismo que abre la puerta al colapso de la economía.
Los bloqueos de vías están en el centro del debate nacional a raíz de su proliferación durante el Paro Nacional, en esta crónica se puede apreciar cómo surgen y se desarrollan tales bloqueos en una ciudad colombiana que tiene cerca de un millón de habitantes.
El Presidente López Obrador ha respetado los Acuerdos Comerciales y Migratorios con Estados Unidos (EEUU) pero los gringos organizan campañas en su contra; tampoco interviene en el enjuiciamiento de los anteriores Gobiernos pero la derecha se une en su contra.
El Paro Nacional crea condiciones para continuar con movilizaciones más vigorosas en las que se rectifiquen debilidades del campo popular y democrático, como lograr un centro común de coordinación nacional y un plan conjunto manteniendo un marco de diversidades.
La sexta semana de Paro Nacional prosigue mientras el Gobierno trata de sofocarlo con la Ley Marcial que denomina “Asistencia Militar”, en la que emplea a sus Fuerzas Armadas (FFAA) reforzadas con escuadrones de narcoparamilitares para atacar a los manifestantes.
En los Días del Campesino y del Medio Ambiente crece el rechazo a la militarización, junto a la exigencia de un Pacto Social para resolver las exigencias del Paro Nacional que le dé futuro al pueblo, siguen denuncias al Proyecto que convertiría la Procuraduría en brazo de la dictadura uribista.
El Paro Nacional busca el hundimiento del Contrato Social Neoliberal y la Dictadura con que lo sostienen, para abrirle el paso a un Contrato Social y una democratización que desarrolle el Estado Social de Derecho ordenado por la Constitución Política.
Este tercer Gobierno de Uribe nació patrocinado por la mafia del Ñeñe Hernández, con sus fichas copó todos los entes de control y con reformas supuestamente ajustadas a la ley los perfecciona como brazos de eliminación de opositores, ¿todavía los EEUU dicen que esta no es una dictadura?