LA PARTICIPACIÓN ES EL ALMA DE LA PAZ CON EL ELN
Raúl Contreras
La participación cuando es ‘de verdad’ es democracia, es el pueblo no sólo las élites incidiendo en su propio destino, la participación será un componente decisivo en el Proceso de Paz con el Ejército de Liberación Nacional (ELN).
Hoy en Colombia hay un clima favorable para hacer más real y efectiva la participación de la sociedad y en especial de las mayorías que históricamente no han tenido voz, ni han sido tenidos en cuenta para decidir el rumbo del país.
La participación fue una de las mayores demandas en las calles durante el Estallido Social del año pasado, hace parte de las aspiraciones que se han impuesto en este 2022, dándole el triunfo electoral a Gustavo Petro y Francia Márquez.
Los problemas que han originado el Conflicto Social, Político y Armado han surgido de la sociedad misma, de la violencia ejercida por los de arriba, de su monopolio del poder, del terrorismo de Estado, de la injusticia social, en consecuencia, la voz de la sociedad, su participación, se constituyen en un actor de primer orden en el Proceso de Diálogos y Negociación, porque los problemas de la Guerra y la paz no se resuelven solamente en una Mesa entre Gobierno e insurgencia.
La Agenda pactada con el Estado en 2016
La participación de la sociedad es el Primer Punto en la Agenda del proceso iniciado con el Gobierno de J. M. Santos en Caracas el 30 de marzo de 2016, el que fue cancelado y saboteado por el subpresidente Duque desde el 7 de agosto del 2018, hasta ahora que terminó su mandato.
Duque cumplió el propósito de Uribe y sus seguidores de ‘hacer trizas la paz’, con el cual también desconocieron los Acuerdos firmados con las Farc burlando su implementación, política que dio trato de Guerra la protesta social, negándose a dialogar con los manifestantes, y que le dio un mayor oxígeno al paramilitarismo y al terrorismo de Estado.
En la Mesa de Conversaciones sostenida con Santos entre 2017 y 2018, ¿hasta dónde se avanzó en el punto de participación?, se realizaron las Audiencias Preparatorias en Tocancipá en las afueras de Bogotá, entre octubre y noviembre de 2017, con la asistencia de centenares de representantes de todos los sectores de la sociedad junto a Delegados del Gobierno y del ELN, acompañados por los Países Garantes y de Apoyo, y la ONU.
En estas Audiencias Preparatorias las distintas organizaciones sociales expresaron sus ideas, acerca de cómo pensaban debía ser la participación de la sociedad en el Proceso de Paz, conclusiones que se recogieron en dos volúmenes publicados por el Pnud.
Preacuerdo sobre Participación
El 23 de mayo de 2018 se logró también un Preacuerdo llamado Fundamentos de la participación, cuyo contenido íntegro es este:
“La elaboración de este diseño ha sido participativa, toma en cuenta las opiniones y propuestas expresadas en las audiencias preparatorias realizadas entre el 30 de octubre y el 16 de noviembre de 2017 en Tocancipá, Bogotá y en forma virtual. También recoge los múltiples comunicados y las propuestas que organizaciones y plataformas de la sociedad enviaron a la Mesa desde el 9 de enero de 2018.
Igualmente, da continuidad e integra los resultados de los esfuerzos previos realizados por diversas plataformas, redes y organizaciones, en particular de mujeres, hasta mayo de 2018, cuando se concluyó este diseño común y concreto en desarrollo del mandato dado por la Mesa.
La participación será como dice la Agenda “a) en función de iniciativas y propuestas, que hagan viable la paz, en el curso y contexto de este proceso; b) sobre los temas de la Agenda; c) un ejercicio dinámico y activo, incluyente y pluralista, que permita construir una visión común de paz que propicie las transformaciones para la nación y las regiones”.
La participación de la sociedad es transversal y articula todos los puntos de la Agenda de la Mesa de Conversaciones del Gobierno Nacional y el ELN.
El proceso de participación será amplio, directo, abierto, plural y transparente, tendrá en cuenta las realidades sociales, los territorios y los sectores básicos. Se desarrolla de abajo hacia arriba, tomando en cuenta las realidades territoriales, temático-sectorial-poblacional del país, y las organizaciones que promueven esos procesos.
Se desarrollará a través de dos carriles: el territorial y el temático-sectorial-poblacional, en lo territorial estarán diversas regiones del país, en lo temático-sectorial-poblacional, tendremos en cuenta sectores y temáticas básicas.
El proceso de participación es multiforme, integral y articulado, tiene identidad propia relacionada con la construcción de propuestas para la negociación de la Agenda de la Mesa.
En el proceso se tendrá en cuenta el enfoque diferencial, es decir se atenderán las especificidades culturales, étnicas, de género, de orientación sexual y generacional entre otras.
El proceso de participación deberá acompañarse previamente y durante el mismo de una estrategia pedagógica y de comunicaciones para que se comprendan los objetivos, alcances y resultados, su desarrollo debe contar con plenas garantías de seguridad y protección a las comunidades, a sus organizaciones y representantes”.