REEDITANDO EL PARAMILITARISMO
En este inicio del nuevo Gobierno la recuperación de tierras usurpadas a indígenas y campesinos ha sido criminalizada, han llamado a la represión estatal contra ella y también los terratenientes los amenazan con sus escuadrones paramilitares.
Comandante Nicolás Rodríguez Bautista
En la entrevista de la emisora W Radio al señor Felix Lafaurie dejó flotando una afirmación, la de “los criminales profesionales ocupantes de tierras”.
Ese es el argumento con que han pretendido justificar la matanza de líderes sociales, reclamantes de tierras y Defensores de Derechos Humanos, que ha producido desplazamientos y destierro, desapariciones, mutilaciones y millares de encarcelamientos.
Las molestias y argumentos del poderoso Presidente de la Federación de Ganaderos (Fedegan) no es buen presagio, porque la reciente historia de matanzas e impunidad están presentes y no se le puede dar más aire al monstruo de la violencia.
Hay que recordar que el paramilitarismo nació en los años 60 del siglo pasado con el argumento de que era necesario que, “algunos civiles le colaboraran a las Fuerzas Armadas (FFAA) en su lucha antisubversiva”.
Luego ese paramilitarismo lo extendieron en el país con el argumento de que “era necesario que ganaderos, empresarios y hacendados se defendieran”.
Con los mismos argumentos nacieron las Cooperativas de seguridad Convivir, la alianza mafiosa de los autodenominados Pepes, que luego los crecieron y conformaron como AUC, estos sí criminales profesionales de los que Lafaurie no quiso hablar en medio de su disgusto.
Los “Grupos de reacción solidaria” que propone el señor Lafaurie, es la nueva presentación del paramilitarismo, porque para los terratenientes las FFAA no son suficientes y por ello necesitan esta otra fuerza para “acompañar a las FFAA”.
Mañana cuando haya otra movilización, otra recuperación de tierras o algo similar, los poderosos se verán amenazados y como los reclamantes de tierras son “criminales profesionales” según Lafaurie, ahora la élite dominante justificará las nuevas matanzas como producto de un esfuerzo “solidario”.
Señor Lafaurie, «los Grupos de reacción solidaria” son la esencia de su concepción de asumir la autoridad por su cuenta, para seguir asesinando a quienes califica de «criminales profesionales», que son los mismos desposeídos de la tierra.
La máquina de Guerra del régimen y su arma paramilitar al enfocarse contra el pueblo, reproduce las condiciones para que crezca la resistencia y la lucha rebelde por la vida.