LA DEUDA HISTÓRICA

LA DEUDA HISTÓRICA

Comando Central

Cambio es la palabra más repetida en este campaña electoral, con esta retórica tratan de decir que están dispuestos a pagar la Deuda Social, salir de la antidemocracia, acabar la corrupción y pasar la página de la Guerra: ‘ver para creer’.

El estallido social del año anterior evidenció el déficit social histórico que tiene el Estado con los colombianos, en especial con las mayorías empobrecidas y excluidas; como siempre en las elecciones presidenciales llueven las promesas de soluciones a la inequidad social, que en el año anterior deja cerca de 21 millones de personas en condiciones de pobreza, ojalá pasadas las elecciones no queden solo los carteles publicitarios, mientras la pobreza y la desigualdad aumenta.  

Departamentos ricos en minerales y biodiversidad como Chocó y La Guajira siguen siendo los que tienen mayores índices de pobreza y de mortalidad infantil por desnutrición aguda, porque mientras sus bienes son expoliados por las multinacionales su población la hunden más en la miseria, además de tener que enfrentar la depredación medioambiental y su impacto en la salud de la gente.

Para mantener este régimen a favor de una élite privilegiada los últimos Gobiernos impusieron en el país un Narcoestado que subordina a todos los entes de control para perpetuar la impunidad, mantenida además con la abierta colusión entre las Fuerzas Armadas y el narcoparamilitarismo, que sofoca a ‘sangre y fuego’ cualquier conato de oposición política y protesta popular.

Las políticas gubernamentales deben dinamizar la inclusión social y la restitución de derechos fundamentales y civiles, el Estado tiene la obligación de atacar los factores generadores de desigualdad y antidemocracia, además debe garantizar la plenitud de los derechos de la mayoría que se encuentran en una situación de desventaja.

El pueblo espera que el ganador en las elecciones presidenciales restaure el aplastado Estado Social de Derecho, dé vida a la democracia, la igualdad y la paz, para que las nuevas generaciones sean un pueblo digno que llegue a ser una nación digna.

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