PERÚ CELEBRA BICENTENARIO CON UN GOBIERNO POPULAR

A dos siglos de la declaración de la independencia del Perú y a 100 años de que José Carlos Mariátegui planteara Peruanizar el Perú, esta nación andina en sus luchas para tener patria elige Presidente a Pedro Castillo.

El neoliberalismo fue implantado en el Perú con el terror de Estado y la consiguiente corrupción de la dictadura de Alberto Fujimori (1990-2001), quien gobernó de la mano del Fondo Monetario Internacional (FMI), el Banco Mundial (BM), el Banco Interamericano de Desarrollo (BID) y el Gobierno de los Estados Unidos (EEUU).

En 2001 el Congreso destituyó a Fujimori pero lo sucedieron diversos Gobiernos que también fueron destituidos por corrupción, los que compitieron por quien otorgaba más ventajas a las mineras transnacionales, al FMI y a las mafias políticas que desangran los bienes públicos.

Por tres décadas ha habido miles de movilizaciones, protestas y huelgas de campesinos, indígenas, trabajadores de la salud, educadores y mujeres exigiendo derechos y reformas, pero las fuerzas populares no habían constituido una agenda social común y una fuerza política electoral como la actual.

El neoliberalismo acaba con el Perú

Como  la mayoría de los países al Perú lo quebró el extractivismo minero y agropecuario, la Deuda Externa, la desindustrialización, la destrucción de sus sistemas de salud y educación pública y la enajenación de bienes comunes, depredación que aceleró el cambio climático; a estos desastres debe agregarse el racismo de las élites limeñas que desprecian y excluyen al pueblo campesino e indígena lo cual genera una indignación creciente, que estalla con los padecimientos del Covid-19, que azota con mayor fuerza a la mayoría de trabajadores informales y al pueblo en general que no cuenta con un sistema de salud pública que lo atienda.

“De 32 millones de peruanos, 16 millones, aproximadamente viven directa o indirectamente de la cadena productiva y comercial de la agroproducción y la actividad forestal, 2,3 millones de familias dirigen parcelas de 1 a 20 hectáreas, generando trabajo directo a 8 millones de productores agropecuarios, más de 600 mil personas trabajan en fundos agroexportadores en condiciones nada dignas, motivo de violentas protestas exigiendo una Ley que los proteja de la esclavitud.” [1].

Puntos fuertes de una campaña exitosa

Los educadores peruanos han realizado huelgas desde 2017 en defensa de la educación, en esas luchas sobresalió el liderazgo de Pedro Castillo, quien hace parte de la Central Única Nacional de Rondas Campesinas del Perú (Cunarc) y del partido Perú Libre.

Los maestros y líderes campesinos concluyeron que para poder aplicar una política que incluya sus intereses y los del pueblo marginado es necesario gobernar y cambiar la Constitución que les dejó Fujimori desde 1993, por esto en 2021 fueron a elecciones con candidatos propios, ganaron la primera ronda para Presidente, Perú Libre alcanzó 37 escaños en el Congreso, para la segunda ronda fueron en alianza con el izquierdista Juntos por el Perú que obtuvo 4 Congresistas.

El 15 de junio la Oficina Nacional de Procesos Electorales (Onpe) anunció que Pedro Castillo ganó con 8.835.970 de votos (50,125 por ciento) y Keiko Fujimori obtuvo 8.791.730 (49.875 por ciento) [2]; el Jurado Nacional de Elecciones (JNE) no ha confirmado los resultados, porque sigue resolviendo apelaciones sobre pedidos de nulidad de actas hechas por la derecha que conspira con militares retirados para dar un Golpe de Estado.

“Los neoliberales ya cerraron filas en el Congreso para bloquear cualquier iniciativa de cambio constitucional: Fuerza Popular con 24 escaños, Alianza para el Progreso con 15, Renovación Popular con 13, Avanza País con 7 y Podemos con 5 suman 64 votos, y podrían sumar 80 si Acción Popular y sus 16 parlamentarios se le suman. Perú Libre con 37 y 4 de Juntos por el Perú solo suman 41 votos” [3]. 

El Bicentenario, el Amauta y Castillo

En 1821 con apoyo del Ejército Libertador del Río de la Plata comandado por San Martín, el Perú declaró su independencia del imperio español, la Guerra continuó logrando la liberación en 1924 con las batallas de Junín y Ayacucho dirigidas por el Libertador Simón Bolívar; una vez alcanzada la independencia la República continuó gobernada por la casta minera, comercial y latifundista.

El Amauta (Maestro) José Carlos Mariátegui (1894-1930) fundó el Partido Socialista Peruano en 1928, sentenció que no es posible liberarse del imperialismo norteamericano sin liberarse del capitalismo, y que el socialismo es viable en Latinoamérica si incorpora el legado comunitario indígena y erradica el racismo.

En el Bicentenario el pueblo peruano elige al Amauta Castillo para hacer valer los derechos colectivos y personales de los hombres y mujeres costeños, serranos y de la selva, de indios y cholos.

Pedro Castillo como Presidente proyecta estos cambios apremiantes: una Reforma Constitucional para renegociar la Deuda Externa pues la Constitución de 1993 lo impide, una Reforma Agraria, pasar de un Presupuesto del 3 al 10 por ciento del PIB para salud y educación, cobrar más impuestos a las grandes corporaciones mineras, comerciales, agroindustriales y financieras, y fomentar la producción nacional.