SOBRE ENDEUDARSE NO ES LA SOLUCIÓN
Claudia Julieta Parra
La política económica gubernamental da prioridad al Gasto Corriente, lo que incrementa el déficit y pone en saldos rojos las arcas del Estado, ya que no existe una estrategia de austeridad, que contribuya a solventar la actual crisis económica, pero sí exacerba el empobrecimiento y la exclusión.
En días pasados bajo cierto secretismo, el Ministerio de hacienda concretó la venta masiva de Títulos de Tesorería (TES), por un valor de 23 billones de pesos, los títulos tienen una Tasa promedio del interés del 13,15 por ciento y tienen un vencimiento entre 2029 y 2040; cuentan con una variancia y Tasa diferente para cada asignación, 2029 (12,99 por ciento), 2033 (13,05 por ciento), 2035 (13,24 por ciento) y 2040 (13,32 por ciento).
La política financiera del Gobierno de Petro se ha concentrado en incrementar el Gasto Corriente (burocracia, guerra, pago de la deuda Externa), para ampliar la cobertura de algunos programas de subsidios y crear más burocracia estatal, pero lo hace sin tener en cuenta el momento financiero que atraviesa el país, en otras palabras, aumenta considerablemente los pasivos, en un momento en que los activos decrecen hasta llegar a indicadores negativos.
La política de glosa [pagar deuda adquiriendo nueva deuda externa] de pasivos, incrementa el déficit fiscal y pone en saldos rojos la Regla Fiscal de mediano plazo y sobre incrementa la Deuda Externa (DE), que en septiembre de este año llegó a 205.795,6 millones de dólares, lo que equivale al 48,4 por ciento del PIB; convirtiendo este pasivo y su manejo en una pesada carga que asfixia el Producto Interno Bruto (PIB) e incrementa el déficit de Gasto Corriente tornando insolvente el erario.
El problema principal de nuestra economía, radica en la política fiscal y económica, toda vez que los tributos recaudados cubren medianamente la balanza de gastos, pero lo recaudado no se invierte, sino que, en un margen superior al 77 por ciento, se destina al Gasto Corriente y además se consume más de lo que se produce.
Salir de la actual crisis y reactivar nuestra economía, implica reformas estructurales al fisco y al sistema productivo, toda vez que este sistema no genera ni inclusión social ni mucho menos crecimiento ni productividad; por ende, la dinamización de la economía requiere de un cambio estructural en la política económica, un modelo económico que tenga como base el aumento del poder adquisitivo per cápita, el desarrollo integral, el fortalecimiento del sistema productivo nacional, y la disminución de la brecha de desigualdad y pobreza (multidimensional y monetaria).