LOS VÁNDALOS EN COLOMBIA SÍ EXISTEN (II)
Comandante Nicolás Rodríguez Bautista
Para estigmatizarlos tachan de “vándalos” a los manifestantes que se defienden del trato de Guerra que reciben del régimen, acá en este relato histórico se pasa revista a la serie de actos vandálicos ejecutados por las clases dominantes contra el pueblo colombiano.
Comenzando los años 60 del siglo pasado, con la asesoría dada por las Fuerzas Especiales de Estados Unidos (EEUU) a las Fuerzas Armadas (FFAA) colombianas, la oligarquía refinó las prácticas de paramilitarismo que venía aplicando desde hacía dos décadas, las que siguieron siendo ejecutadas por los Gobiernos de turno contra sus opositores, así los vándalos en el poder respaldaron con Leyes y Códigos el uso de la fuerza ilícita agenciada desde el Estado.
Durante la bonanza de producción y exportación de marihuana ocurrida en las décadas de los 60, 70 y 80, proliferaron los escuadrones de matones creados por las mafias de traficantes, las que también fueron usadas por los cabecillas del régimen y sus asesores estadounidenses en contra del movimiento popular y las fuerzas opositoras, guerra sucia en la que además las clases dominantes extrajeron jugosas ganancias de esta bonanza.
En los últimos 40 años con el apogeo de las plantaciones de coca el régimen terminó de convertirse en un Narcoestado, en el que los vándalos en el poder sacrifican a los más humildes con su fracasada Guerra contra las drogas, mientras los nuevos ricos hegemonizan el régimen en alianza con los banqueros que les legalizan sus multimillonarias ganancias, poder político y económico que defienden con ejércitos de narcoparamilitares de un tamaño mayor que las propias FFAA estatales.
Los narcoparamilitares bajo el nombre de AAA y MAS exterminaron miles de activistas de izquierda en los años 80, luego en los 90 con el rótulo de AUC masacraron y descabezaron la mayoría de las organizaciones populares en todo el país.
Comenzando este siglo el narcoparamilitarismo se ensaña contra los líderes sociales, junto a la macabra operación de exterminio de inocentes a quienes luego de ser ejecutados por las FFAA, los presentan como “guerrilleros dados de baja en combate”, con el fin de mostrar resultados en la Guerra antisubversiva, todas estas prácticas genocidas los vándalos en el poder aunque las ocultan y niegan nunca han podido limpiar sus manos ensangrentadas.
Con el florecimiento del narconegocio surgió el vándalo que lo lidera, apodado por el propio Pablo Escobar como el doctor Varito, nacido de un padre ligado al Cartel de la cocaína de Medellín y una madre emparentada con el Cartel de la cocaína de Cali; se afianzó primero como jefe del Departamento de la Aeronaútica Civil (Aerocivil) y luego como Gobernador de Antioquia, desde donde estructuró el manto legal del narcoparamilitarismo al crear las Cooperativas de seguridad Convivir, con las que plagaron el país con bandas como la nefasta de Los 12 apóstoles, encargadas de ejecutar una limpieza política que llega hasta nuestros días.
Tras una década de exterminio ejecutado por los narcoparamilitares de las AUC, el doctor Varito los indultó en 2005 y cuando estos comenzaron a confesar que actuaron por órdenes de los vándalos en el poder, extraditaron a los EEUU a los principales capos en 2008.
Este doctor en 2006 en su carrera por el poder inauguró la reelección presidencial de manera fraudulenta con lo que logró aferrarse a la silla presidencial por 8 años, y sigue siendo hoy el sanedrín de la extrema derecha, aun cuando acusa serios desgastes por sus crímenes contra los humildes y contra incómodos socios suyos, junto a su enriquecimiento ilícito e ilegalidades de todo tipo.
El mencionado doctor patrocinó al actual Presidente contando con los votos comprados y presionados por distintas mafias del narcotráfico, que hace que este sea su tercer Gobierno, donde el que se sienta en la silla presidencial apenas es un portavoz del “rey del mundo y del inframundo” como lo llamó Don Berna el capo antiguo aliado suyo; esto explica por qué en esta coyuntura, en que el pueblo se ha levantado contra el régimen, sea el doctor Varito quien tome las riendas de las acciones con que buscan sofocar a los manifestantes.
Es por todo lo anterior que empotrados en el poder, los vándalos en Colombia sí existen.