LO QUE NOS AFECTA LA GUERRA COMERCIAL DE TRUMP

LO QUE NOS AFECTA LA GUERRA COMERCIAL DE TRUMP

Claudia Julieta Parra

La guerra arancelaria de Trump agita el mercado global y sus efectos se sienten en todo el mundo, en especial en los países dependientes del capital extranjero, cuyo mercado interno está determinado por la materia prima importada.

Los excesivos aranceles impuestos por Estados Unidos a diferentes países a quienes quiere disputarles el mercado de una manera hostil, han generado movimientos de gran tamaño en el mercado bursátil global y en el mercado en general; las tensiones comerciales entre Estados Unidos y China han escalado exponencialmente. Las dos principales potencias del mundo se devuelven los golpes y China, en represalia, impuso aranceles de 125 por ciento a los productos estadounidenses.

Kristalina Georgieva, Directora General del Fondo Monetario Internacional (FMI), recientemente aseguró que, por la guerra comercial iniciada por los aranceles de Trump, se prevén reducciones notables en la producción, en las próximas proyecciones económicas del FMI, que pueden disminuir el crecimiento global por debajo del 1,6 por ciento, lo que agravaría la deceleración existente. Georgieva fue categórica al afirmar que, “la volatilidad de los mercados financieros ha aumentado. Y la incertidumbre en torno a la política comercial es descomunal, se está poniendo a prueba de nuevo con la reconfiguración del sistema comercial mundial”.

Esta guerra comercial que tiene como objetivo la disputa de la hegemonía, pero como trasfondo tiene la aplicación continua de un modelo económico de libre mercado, que monopoliza la riqueza en un reducido grupo plutocrático, incrementa la desigualdad y la pobreza (monetaria y multidimensional), además de desacelerar el mercado global y afectar enormemente nuestro mercado interno; que incrementa el déficit de poder adquisitivo, impactando el mercado interno, desacelerándolo y acercándonos a una recesión profunda.

Paliar los impactos de esta guerra comercial y de la recesión económica global, exige la reformulación de la actual política económica, buscando el decrecimiento del Gasto Corriente (burocracia, guerra, pago de intereses de Deuda externa -DE-), el congelamiento de la DE y una posible refinanciación de la misma; al igual que una política de tributación con énfasis redistributivo, donde el mayor aporte lo hagan los grandes capitales y que las capas sociales medias y bajas sean exentas, para que este dinero se pueda percibir en fluctuación de masa monetaria, para remediar la caída abrupta que sufre la demanda y dinamizar los mercados.

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