“El estado de la economía de EEUU no puede funcionar sin el apoyo financiero y material de fuentes externas, solamente los países europeos ligados a ….
Mes: septiembre 2022
El pueblo en las calles instaló un Mandato para cambiar el Estado y colocarlo a servir a la gran mayoría, por este impulso llegó al Gobierno una coalición de fuerzas progresistas, que deben lidiar con la élite contraria al cambio respaldada por la plutocracia de Estados Unidos (EEUU).
El Chocó rico en bienes naturales es a la vez el más empobrecido y excluido, las comunidades indígenas y negras sufren el despojo de su territorio por militares y paramilitares, con el fin de abrir paso al desarrollo de megaproyectos, ofensiva que es combatida por los Frentes del ELN.
El Ministro de Defensa dice que se guiará por la Doctrina de Seguridad Humana para cambiar la gringa de la Guerra Perpetua contra el Enemigo Interno, mientras las Fuerzas Armadas (FFAA) siguen con esta hasta que la nueva cuente con la fuerza necesaria para imponerse.
Los conflictos por la tierra reactivados en estos meses siempre han estado presentes por la escandalosa concentración de la propiedad, que han sido la causa de luchas campesinas, indígenas y de comunidades afro, y también son el trasfondo de las luchas guerrilleras.
Suenan alertas por los desastres que dejarán las lluvias de La Niña pero la desmesurada inflación global impacta con mayor fuerza las economías dependientes, y en Colombia la ola inflacional presenta tendencias graves que amenazan con desacelerar la economía y llevarla al colapso.
Los asesinatos a sangre fría de ciudadanos indefensos como Dylan Cruz y Javier Ordoñez por la Policía, son muestra irrefutable de la degradación de las Fuerzas Armadas (FFAA), con la impunidad que rodea estas muertes buscan legitimar los Crímenes de Estado como maniobra disuasiva de los levantamientos populares.
El 9 y 10 de septiembre se conmemoraron dos años de la masacre de 14 personas y más de 305 heridos a manos de la Policía en Bogotá y Soacha, lucha contra la crueldad policial que hoy se mantiene pues militares y paramilitares continúan atacando la protesta social.