EL CASO DEL HIJO DEL PRESIDENTE
Sergio Torres
El 29 de julio el país se sorprendió con la captura de Nicolás Petro y Daysuri Vásquez, el hijo del presidente y su exesposa, acusados por manejo de dineros ilícitos en relación con la campaña presidencial de Gustavo Petro.
Un comunicado de la Fiscalía General de la Nación informaba que: “se hicieron efectivas las órdenes de captura proferidas contra Nicolás Fernando Petro Burgos, por los delitos de lavado de activos y enriquecimiento ilícito y Daysuris del Carmen Vásquez Castro por los punibles de lavado de activos y violación de datos personales por hechos ocurridos desde 2022 a la fecha”.
Durante el desarrollo de las audiencias empezaron a aparecer los procedimientos indebidos, las exageraciones y las negaciones a las peticiones de la Fiscalía; solo al tercer día de audiencia el juez 74 penal municipal de control de garantías, negó la solicitud de medida carcelaria y decidió que Nicolás Petro continuará la investigación en libertad condicional por «argumentación precaria», el juez explicó que la Fiscalía no argumentó por qué debía ser privado de la libertad el hijo del presidente y su exesposa.
Las pruebas hasta ahora presentadas por el fiscal encargado del caso, Mario Burgos, están basadas fundamentalmente en conversaciones de Whatsapp que la propia Day Vasquez entregó. El otro foco de investigación son las cuentas manejadas por Nicolas Petro con movimientos de altas sumas de dinero.
El “show” mediático y la matriz contra el presidente
Con el paso de las audiencias, empezaron a construirse matrices en contra del presidente, iniciaron la fabricación de noticias falsas y supuesta información con la que prácticamente el presidente debía renunciar, buscando la desestabilización del gobierno y manipular la opinión, montando la idea de una supuesta entrada de dinero ilegal a la campaña Petro Presidente, lo que supone una inhabilidad moral, en un claro ataque a la legitimidad de Gustavo Petro.
Al poco tiempo de conocer su libertad condicional, Nicolás Petro optó por conceder una entrevista a la Revista Semana, donde expresó que: “Él [Gustavo Petro] no sabía de esos aportes. Nunca se lo comenté. No tenía forma de enterarse de esos aportes”.
El proceso probablemente transcurrirá a la par del periodo presidencial, ya que si la Fiscalía llegase a probar la relación de los dineros con la campaña y al entonces candidato, esto pasaría a la Comisión de Acusaciones de la Cámara de Representantes y al Consejo Nacional Electoral.
Bonus Track
Entre las respuestas del presidente al escarnio moral que intenta Semana y las defensas desatinadas de sus copartidarios, Petro trinó el 4 de agosto:
“Lo sucedido con mi hijo es para mí terrible y muy lamentable. Ojalá algún día pueda hablar con él y perdonarnos. Como lo dije antes, no presionaré como presidente a la justicia en su caso, los funcionarios judiciales que intervengan en su proceso serán por mí respetados”.
Terrible prueba de la tradición corrupta de las campañas presidenciales y la impunidad de estos casos, poco defiende a Petro compararlo con estos casos, como este trino de Gustavo Bolivar del 4 de agosto: “No cayó Samper ante evidente entrada de dinero del Cartel de Cali. No cayó Uribe ante la confesión de paramilitares que dijeron financiar su campaña. No cayó Santos ni está preso Zuluaga con pruebas que delatan dineros de Odebrecht a sus campañas. No cayó Duque con pruebas de ingreso de dinero del narco Ñene Hernández a su campaña. Menos caerá Petro sin una sola prueba de financiación ilegal”.