SILENCIAN A QUIENES DEFIENDEN LOS TERRITORIOS
Himelda Ascanio
“El proyecto es asesinarlo a uno para que se calle (…), siempre han creído que con asesinar, desaparecer o encerrarlo a uno se acabó el proyecto social, eso no es tan fácil porque aquí no es una persona, es un movimiento”: Teófilo Acuña.
Desde la firma de Acuerdo de Paz en noviembre de 2016 han asesinado más de 1.314 líderes populares, esto obedece a la defensa que ejercen de sus territorios en contravía de la economía extractiva que impone megaproyectos mineroenergéticos, agroindustriales y de infraestructura.
El 22 de febrero perpetraron el asesinato de los reconocidos líderes campesinos Teófilo Acuña y Jorge Tafur en el corregimiento Puerto Oculto en San Martín, Cesar, voceros de la Comisión de Interlocución del Sur de Bolívar, Centro y Sur del Cesar (Cisbcsc), sur del Magdalena y del Coordinador Nacional Agrario (CNA).
El exterminio en curso en el país presenta patrones comunes y sistemáticos, fueron sobrevivientes del Genocidio contra la Asociación Nacional de Usuarios Campesinos (Anuc) y del Movimiento Político A Luchar perpetrados desde los años 80 del siglo pasado, víctimas de desplazamiento forzado durante la arremetida narcoparamilitar en los 90 y 2000, además en 2007 la Fiscalía realizó el primer montaje judicial por oponerse a la explotación minera de Anglo Gold Ashanti; en el caso de Teófilo el segundo intento por encarcelarlo ilegalmente fue el 20 de diciembre de 2020, en el que la jueza determinó que la Fiscalía no presentó pruebas y lo dejó en libertad.
El 7 de enero los narcosicarios amenazaron a la compañera de Teófilo: “dígale que se esconda, que lo van a matar”, el 9 de enero intentaron ingresar a su casa en Aguachica, Cesar, posteriormente le hicieron seguimiento y vigilancia en camionetas con vidrios polarizados; razón por la cual la Cisbcsc el 12 de enero solicitó medidas de protección urgente [1].
El 16 de febrero los campesinos de Matecaña y Gallúa del complejo cenagoso del río Lebrija en el corregimiento de El Terraplén de San Martín, Cesar, aledaños a Puerto Oculto, fueron atacados con arma de fuego por el terrateniente Wilmer Díaz, quien hirió gravemente con un disparo en la cabeza al campesino Rafael Centeno; el 18 de febrero el terrateniente volvió a embestir contra la comunidad campesina esta vez en compañía de Leusman Guerra Rico Alcalde de San Martín, el Comandante de la Policía Joner Alvis y soldados de la Base Militar de las inmediaciones orgánicos de la Quinta Brigada del Ejército, en esa ocasión el comandante de la Policía señaló a los campesinos de “ser guerrilleros”, estas amenazas los dos líderes las denunciaron al Tercer Canal 10 minutos antes que los asesinaran [2].
Conscientes del riesgo de perder la vida en el país más hostil para los Defensores del medioambiente, Teófilo había asegurado “el proyecto es asesinarlo a uno para que se calle (…) siempre han creído que con asesinar, desaparecer o encerrarlo a uno se acabó el proyecto social, eso no es tan fácil porque aquí no es una persona, es un movimiento”.
Perpetradores: los paramilitares de Juancho Prada y los Díaz
Wilmer Díaz es hijo de Alirio Díaz un terrateniente paramilitar que a mediados del 1995 usurpó las ciénagas de El Congo y La Torcoroma, en 2011 se extendió hacia Matecaña y La Gallúa y en 2014 hacia Polo Vides, Vizcaína y Los Carrachos; entre 1993 y 2002 junto a Juancho Prada creo la banda narcoparamilitar H. J. Peinado quienes cometieron al menos 15 masacres en San Alberto, San Martín, Río de Oro, Aguachica, Gamarra, La Gloria, Pelaya y Tamalameque, justo antes que el Incora comenzara la titulación de tierras.
Estos narcoparamilitares solo de El Terraplén desplazaron 2.500 campesinos quienes iban a recibir las parcelaciones de La Holanda, Candelia, Campoalegre, Buenavista, La Vega y La Granja; apoyado por los paramilitares el 28 de octubre de 2007 Díaz se hizo elegir Concejal por el corregimiento El Terraplén con el aval del partido Cambio Radical [3].
El régimen no para la Guerra contra el Enemigo Interno
Miguel Caicedo Guangua era Guardia Indígena del Resguardo Piapali Pueblo Viejo en Ricaurte, Nariño, el 19 de febrero sufrió un atentado con arma de fuego en su vivienda del que salió ileso.
Saulo Moreno era miembro de la Guardia Indígena del Resguardo Muellamues, fue asesinado el 19 de febrero en su vivienda ubicada en la vereda Pueblo Bajo – Tinta, en Guachucal, Nariño.
Bolívar Lavin Delgado pertenecía a la Guardia Indígena del Resguardo Piguambí Palangala, fue asesinado el 20 de febrero en Tumaco, Nariño.
Fabián Alexander Rodríguez Suárez excombatiente que hacia parte del ETCR Heiler Mosquera de La Pradera, fue asesinado el 21 de febrero en la vereda Jardines de Sumcumbíos en el Valle de Guamuez, Putumayo.
Julio Victoria Cárdenas era el Presidente de la Junta Directiva del Concejo Menor de Acadesan de la comunidad de Barrios Unidos y pertenecía a la Guardia Cimarrona del Chocó, fue asesinado el 24 de febrero en Barrios Unidos en el Litoral San Juan, Chocó.
Jorge Santofimio era excombatiente y representante legal de la cooperativa Comucon y Delegado para el PNIS Putumayo, fue asesinado el 24 de febrero en un ataque mientras realizaban una reunión de la cooperativa en la vereda Santa Lucía de Puerto Guzmán, cuatro excombatientes y un bebé quedaron heridos.
Dilson Borja Domicó era miembro de la Organización Indígena de Antioquia y de la Guardia, fue asesinado el 25 de febrero en su vivienda en Turbo, Antioquia.
Gustavo Antonio Torres era líder de la Asociación Caño Indio Productivo, fue asesinado el 26 de febrero en la vereda Tienditas del corregimiento Orú en Tibú, Norte de Santander.
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[1] Comunicado Cisbcsc, 12 -01-2022.
[2] Asesinan a Teófilo Acuña y Jorge Tafur después de denunciar a paramilitares en el Sur de Bolívar. Tercer Canal, 22-02-2022.
[3] Ciénagas de Terraplén enfrentan a campesinos y finqueros. Verdad Abierta, 11-05-2015.