FACTORES DE CONFLICTO EN ARAUCA

Álvaro Solano

Una nueva fase del conflicto en Arauca estalló el Primero de enero con los enfrentamientos entre guerrilleros elenos y el grupo de alias Arturo, que se ha convertido en impulsor del narcotráfico y la agresión a los pobladores que rechazan la resiembra de coca.

1- Intereses geoestratégicos y riquezas naturales

Arauca es zona de disputa entre el pueblo organizado contra los intereses del Gobierno de los Estados Unidos (EEUU), las transnacionales, las empresas extractivistas, los megaproyectos y el narcoparamilitarismo; es una región geoestratégica por tener frontera con Venezuela, grandes reservas petroleras, todos los pisos térmicos, abundante en nacimientos y caudales de aguas, y biodiversidad.

Los EEUU la han mantenido como laboratorio de Guerra, por ello fue declarada primero Zona de Rehabilitación y Consolidación y ahora Zona Futuro, en simultáneo han desarrollado sucesivas arremetidas narcoparamilitares, como la del bloque vencedores de Arauca de las AUC en el inicio del mandato de Uribe (2002-2010), así refuerzan el control territorial y aseguran sus planes de saqueo y agresión.

La Brigada 18 del Ejército y sus Batallones Rebéiz Pizarro y Navas Pardo, más la Base Naval de Arauquita y otras guarniciones militares cuentan con el asesoramiento, entrenamiento y apoyo de militares estadounidenses, una de estas es la Brigada de Asistencia de la Fuerza de Seguridad (Sfab), que son “unidades especializadas con la misión central de llevar a cabo actividades de capacitación, asesoramiento, asistencia, habilitación y acompañamiento con naciones aliadas y asociadas” [*]; una de las operaciones de Guerra Híbrida que adelanta esta Sfab es conformar y operar con grupos que se hacen pasar como sucesores de las desmovilizadas Farc, como el de alias Arturo, tácticas denominadas como “matar con puñal ajeno”.

2- El conflicto no es por narcotráfico

El ELN desde el Tercer Congreso Nacional de 1993 acordó hacer un deslinde categórico con el narcotráfico, para reafirmar esta postura en octubre del 2020 la Dirección elena envió una carta al Departamento de Estado de los EEUU, donde propone: “conformar una Comisión Internacional para que verifique sobre el terreno si el ELN tiene cultivos, laboratorios, infraestructuras o rutas para el narcotráfico, o si tiene negocios con precursores químicos usados en la producción de cocaína”.

En Arauca hace muchos años el pueblo organizado elaboró su propio Plan de Vida, definieron que la vocación productiva del departamento era agropecuaria, no petrolera ni extractivista, mucho menos cocalera, cuando algunos se dejaron llevar por la ‘fiebre cocalera’ impulsada por las otrora Farc, las mismas comunidades decidieron autónomamente, sin apoyo del Estado ni de la comunidad internacional hacer la sustitución de la coca por producción de cacao, plátano, leche y otras actividades agropecuarias, lo que representa un modelo alternativo.

El ELN siempre ha respetado y acompañado estos procesos de producción agropecuaria, pero ahora este grupo que se hace llamar Frente Diez de las Farc desconociendo esa realidad trata de imponer su Narconegocio, para ello motiva y ofrece dinero a la gente empobrecida para que vuelvan a sembrar coca, además amenazan y persiguen a quienes se les oponen.

3- La hermana República de Venezuela

Otra mentira que ha querido impulsar el Gobierno de los EEUU y que ‘repite como loro’ la ultraderecha colombiana es que el ELN recibe apoyo del Gobierno venezolano, lo que ocurre es que la frontera entre Colombia y Venezuela tiene más de 2.200 kilómetros, la que en muchas partes es una línea imaginaria o frontera invisible, territorio que alberga comunidades indígenas y campesinas que siempre han sido binacionales, lazos que históricamente son muy fuertes al ser pueblos hermanos y con parte de las familias localizadas a ambos lados de la tal frontera.

Entre Colombia y Venezuela ha habido varios procesos de migración a causa de la situación económica de cada país, la valorización de las monedas (en los años 70 del siglo pasado un Bolívar valía 17 Pesos), mejores oportunidades o por motivos de conflicto político; en 1998 la población de colombianos en Venezuela estaba estimada en 4 millones, la mayoría ilegales.

El ELN desde que surgió en esa región ha acompañado a estas comunidades en sus luchas por vida digna; pero no es cierto que tenga el amparo del Gobierno vecino, por el contrario los Gobiernos de ambos países nos persiguen, capturan y asesinan, en la última década hemos sufrido el asesinato de varios mandos de esta región como William y Rafael, entre otros.

4- Accionar militar legítimo

No es cierto que nuestro accionar militar “favorezca a la ultraderecha, Uribe y sus coaliciones” en la campaña electoral, ni que vaya en contra de la población; históricamente el ELN ha combatido a las mafias narcoparamilitares en todo el país, a sus promotores y quienes los apoyan, al igual que lucha contra las Fuerzas Armadas (FFAA), en la actualidad el ELN no tiene una Mesa formal de negociaciones, no existe un Cese el Fuego, por tanto no hay impedimentos para el accionar militar.

El Frente de Guerra Oriental del ELN con el apoyo de la población ha librado numerosas batallas para evitar que esas bandas narcoparamilitares se apoderen de la región, por ejemplo, durante los primeros 5 años del mandato de Uribe, en la región estas bandas en alianza con el entonces Gobernador paramilitar Julio Acosta Bernal y las FFAA recrudecieron las masacres, asesinatos, provocaron desplazamientos y millares de víctimas.

Hemos manifestado públicamente nuestro respeto al derecho que tiene el pueblo de expresarse en las urnas, por tanto, nuestro accionar no va en función de favorecer a ningún Partido o candidato, respetamos la decisión de cada persona en ese sentido.

Nadie puede poner en duda nuestra convicción revolucionaria y nuestro compromiso en la defensa del territorio y del pueblo de quien lo agreda, nuestro compromiso es de Liberación o Muerte.