TESTIMONIO DE MIGUEL RASGUÑO
Frente Oriental
En los enfrentamientos ocurridos el 2 de enero en las riberas del río Arauca, unidades del ELN detuvieron a Miguel Rasguño, quien antes de la desmovilización de las Farc se desempeñaba como explosivista y ahora aparece haciendo parte del grupo armado que comanda alias Arturo o Gerónimo.
En este testimonio grabado en vídeo dado a conocer el 4 de enero por el Frente de Guerra Oriental del ELN, Miguel reconoce que:
1- Arturo y su grupo “trabajan para el Gobierno y los militares colombianos”,
2- en alianza con agencias de Estados Unidos perpetraron recientemente el asesinato de Romaña el líder de las Farc,
3- el Coronel Pedro Enrique Arciniégas del Ejército colombiano no fue secuestrado por el grupo de Arturo, sino que estuvo impartiéndoles instrucción en operaciones de inteligencia.
Este es el testimonio que rindió:
Me llamo Miguel conocido como Rasguño, me fui a la edad de 14 años para las FARC, cuándo existía la verdadera FARC; una organización revolucionaria que conocí y anhelamos muchos por esa ideología y ahora pues qué ve uno todo cambiado, ha cambiado mucho la vaina de la ideología, se dedicaron fue al narcotráfico y a trabajar con bandas ajenas a la organización.
Estoy en estos momentos aquí dando mí declaración, Arturo que trabaja con el Gobierno colombiano, Arley González y Chucula también trabajan con el Gobierno colombiano y es algo que no podemos seguir en esto así.
Las cocinas son manejadas por Arturo y Arley, Anderson creo que es el otro que maneja las cocinas y así, como siempre jamás he estado de acuerdo en la cuestión de mirar un guerrillero tener que cargar con eso.
Pedro Enrique Arciniegas, la liberación de ese coronel es una farsa, nunca lo tuvieron como prisionero o algo de cuestión de finanzas o político; vino fue cómo a dar instrucciones a enseñar y preparar personal en cuestión de armamento e inteligencia, lo liberaron pues ahí se da uno de cuenta que le hacen creer a uno que en realidad las cosas son verdaderas, pero nunca son como uno las ve o se las hacen que uno las valla a creer.
Veo la farsa que hay en los Falsos Positivos que hacen en Colombia para hacernos creer que las cosas rectas y correctas como deben de ser, pero son vainas montadas con FARC, el Coronel y los altos mandos del Gobierno para hacer todos estos Falsos Positivos; en realidad le duele a uno, uno casi toda una vida en esto y es doloroso, pero bueno listo qué vamos a hacer eso es lo que le hacen creer a uno ahí, pero para adelante.
De todas formas me considero ser revolucionario y mi pensamiento nunca me cambiara y me duele con lo que hacen y lo que nos están haciendo, en realidad me he pegado un estrellónazo grande en la vida; Arley, Arturo y Chucula tiene nexos con el Gobierno colombiano, así mismo planificaron la muerte de Romaña, sabemos qué planificaron la muerte de Romaña en conjunto con la DEA, la Policía y el Gobierno colombiano, es algo que a uno como revolucionario le duele, una cuestión de esas cierto, porque estamos en esto y nos vinimos creyendo en un proceso revolucionario verdadero y resultamos engañados, llevados a las cosas que no están acorde al proceso revolucionario, al Ejército que conformo el camarada Manuel, Jorge, quiénes dieron sus vidas por este pueblo colombiano, por sacar adelante todo y ahorita todo está cambiado.
Hago un llamado a muchos de mis compañeros y amigos que están allá en la FARC, en realidad me duele porque le hacen creer a uno las cosas al contrario de lo que es la verdadera FARC que yo conocí y anduve, les hago un llamado que salgan y se vengan porque todas formas es duro y doloroso que nos hagan creer que esto es un Ejército revolucionario, pero como tal no es así, entonces mi llamado es que busquen en el lado del verdadero Ejército revolucionario, que piensa de verdad en los pensamientos del libertador Simón Bolívar, aquellos que han ofrendado sus vidas y han dado sus vida por el proceso.
La versión del accionar conjunto del Ejército, paramilitares y las llamadas «disidencias del Frente 10 de las FARC», es plenamente confirmada a las luz de las declaraciones del sacerdote Javier Giraldo publicadas hoy en El Espectador 20-20.