EL JEFE, EL GANADERO Y MISTER OTTY
Ni lo uno ni lo otro, sino todo lo contrario. El jefe del proyecto político dice una cosa, su gerente hace otra y sus operadores hacen lo que les viene en gana. Difícil que avance un proceso de paz en medio de voces disonantes internas y múltiples enemigos externos.
El proyecto de paz en el gobierno del doctor Petro, arrancó con expectativa en términos de una aparente cercanía con el modelo de solución política. Poco después apareció otra versión del mismo proyecto de paz, encarnada en Otty Patiño, adherido a la pacificación y el DDR (Desmovilización, Desarme y Reinserción). Ambos con la misión de empacar a todos los procesos de diálogo en un mismo costal, algo imposible en el contexto histórico del conflicto social, político, económico y armado.
Trastorno disociativo o política dual
Para caminar hacia la construcción de la paz, se requiere generar confianzas entre todas las partes vinculadas y comprometidas, pero esto no es posible si con una mano se firma un acuerdo y con la otra ‘clavan un puñal por la espalda’.
Menos aun cuando en un proceso de Mesa de Diálogos, los y las delegadas del gobierno no están ni siquiera de acuerdo con seguir estando ahí. Situación que tendría una respuesta sencilla, pero contrario a eso, los auto disidentes de su propia representación, siguen siendo delegados del gobierno, solo para atacar con este rótulo y la aparente legitimidad que esto les da.
Un caso típico es el del jefe de los ganaderos, José Félix Lafaurie, quien a veces actúa y opina como delegado del gobierno en la Mesa con el ELN, otras veces es representante ganadero, otras más como vocero del partido de ultraderecha Centro Democrático, y algunas otras aparece como portavoz del clan familiar. En todas ellas sus vínculos están con la personalidad destructiva del Proceso de Paz, encarnada en Otty.
Con estos trastornos, o con la deliberada decisión de atacar la posibilidad de construir la paz, es apenas normal que apelen a la mentira como arma y el cinismo sea una lógica normalizada. Es por eso que desconocen y hasta critican lo que ellos mismos han firmado. Con plena convicción mienten y generan confusiones sobre dinámicas de las que bien conocen su funcionamiento.
Ayuda profesional o intervención popular
El imperialismo norteamericano parece haberse decantado por la imposición de representantes con aparente demencia o como se dice popularmente ´se hacen los locos’, en Suramérica y en otras regiones del mundo donde el imperio hace sus guerras, hay casos evidentes de esta forma de desestabilizar. En Colombia no es diferente, ya hay varias representaciones con estas características, como las que operan el propio modelo de paz del gobierno, quienes en la mañana dicen una cosa, a mediodía otro y por la tarde sostiene otra diferente.
El remedio para este trastorno está en la participación decidida de la sociedad. Así como fue la gente la que logró desequilibrar la balanza en favor del proyecto de gobierno actual, es esa misma gente y su convicción de construir la paz con cambios profundos, la que puede hacer trascender y realmente avanzar en un proceso de cambios y solución política a las causas que originan el conflicto. Hay una gran oportunidad de avanzar y profundizar un proyecto popular, lo logrado con el Estallido Social de 2021 debe materializarse.
Asesinados de la semana
Darwin Falla Teteye, era un reconocido etnoeducador de la comunidad Uitoto, quien laboraba en la Institución Educativa Fortunato Really del Resguardo Puerto Sábalo Los Monos, sede Los Estrechos del pueblo Murui Muina del municipio de Solano, Caquetá; fue asesinado el 3 de noviembre en horas de la noche en la comunidad indígena de Los Estrechos ubicada en el municipio de Solano, Caquetá.
José Emanuel Oca Cuspián, era un reconocido líder social, guardia indígena, profesor, artesano y defensor de la vida, el territorio y la cultura Nasa; fue asesinado con arma de fuego el 5 de noviembre, cuando se desplazaba para la vereda Lomitas cerca a la cabecera municipal de Inzá, Cauca.
William Molina, era un reconocido líder social conocido como “El incansable” y fue Secretario Nacional de Sintral; fue asesinado el 5 de noviembre cuando salió de una reunión en Sindiunion y posteriormente, en el barrio la Floresta al norte de Cali, Valle del Cauca.
Rodolfo Enrique Rivera Tarazona, era un reconocido líder social, quien era el actual vicepresidente de la Junta de Acción Social del asentamiento humano La Bendición de Dios en Barrancabermeja, Santander; fue asesinado por sicarios la noche del 6 de noviembre, en Barrancabermeja, Santander.
José Luis Hernández, era un reconocido líder comunal de la vereda El Aracal en el corregimiento de El Morro y miembro de ASOJUNTAS en el departamento de Casanare; fue gravemente herido el pasado 26 de septiembre en medio de un robo en el barrio La Amistad de Yopal, debido a complicaciones en su salud fue trasladado a Bogotá donde finalmente falleció el 9 de noviembre.