COP 26: MÁS PREGUNTAS QUE RESPUESTAS

COP 26: MÁS PREGUNTAS QUE RESPUESTAS

Comandante Pablo Beltrán

El capitalismo está acabando con el planeta, para aplicar paliativos, la ONU intenta limitar la depredación y explotación de la Madre Tierra y sus especies, esfuerzos denominados Conferencia de los Países Parte (COP), comprometidos con Convenios de protección medioambiental.

Colombia ‘se ganó la lotería’, porque este mes de octubre en Cali se realizará la COP 26, los méritos para tal designación, al parecer los hace el país, porque este gobierno adhirió al Convenio contra la proliferación de los combustibles fósiles, de donde surge la primera pregunta: ¿sigue más rápido el gasto de nuestras reservas petroleras, que el desarrollo de energías menos contaminantes?, imitando a los EEUU, ¿aumentaremos la reservas petroleras por medio de la venenosa tecnología del Fracking?

Otros compromisos que ha hecho Colombia para combatir el Cambio Climático tienen que ver con recuperar Bosque Tropical Seco (BTS) (30 por ciento de resultado), deforestación (36 por ciento) y protección de mares (26,5 por ciento).

Aparte de la militarización de Cali, presentada como la garantía del éxito de esta COP 26, son necesarios otros preparativos sobre el contenido y alcance de esta reunión mundial, a la que deben concurrir los 195 países firmantes de Convenios de protección medioambiental.  Los interrogantes que saltan a la vista, hacen parte de dotarnos de un contexto, para entender lo que está en juego en Cali a partir del 20 de octubre.

2- El capitalismo neoliberal sigue en crisis, ¿qué suerte corre la Madre Tierra y sus bienes naturales?

El economista Michael Hudson [1] explica que la economía en su conjunto se ha estado contrayendo desde 2008, sufriendo una crisis financiera constante, un declive constante. Los Estados occidentales apenas son agentes de un poder supranacional, un poder financiero, un poder que impone su control por medios militares, como hemos visto, culminando hoy en la guerra en Medio Oriente. El sector financiero ha establecido una simbiosis con el sector inmobiliario, los seguros, los monopolios y las empresas mineras, que producen rentas de los recursos naturales.

Para resolver la crisis, el poder financiero persigue acumular más capital especulando e incrementando la extracción de bienes naturales, sin importar la suerte del agua, como está ocurriendo en el Páramo de Santurbán -que abastece de agua a Bucaramanga, Cúcuta y decenas de otros municipios-, a donde los clanes mafiosos que gobiernan la región, acaban de trasladar bandas paramilitares, con la finalidad de imponer la explotación de oro, que el Gobierno de Santos (2010-2018) entregó a corporaciones de Emiratos Árabes Unidos.

Corporaciones financieras de Sarmiento Angulo promueven la ocupación narcoparamilitar del Bajo Cauca de Antioquia (Bagre, Caucasia, Nechí, Cáceres, Tarazá, Zaragoza), para explotar la reserva de oro, a la que ya el Clan del Golfo azotó con Maquinaria Amarilla (Leasing financiado por los grandes bancos) y están por iniciar una explotación con mayor tecnología, otra vez financiada por la banca.

3- La actual guerra comercial y tecnológica entre potencias mundiales, ¿cómo afecta la protección de la biodiversidad?

En su más reciente libro el economista Benjamín Bürbaumer [2], recuerda que para controlar los procesos de producción basta con controlar las cadenas de valor mundiales, a través de controlar la propiedad de las tecnologías clave y la organización de las redes de distribución.

La apropiación de la biodiversidad de los ecosistemas, las especies y la genética la logra el poder supranacional, por medio de empresas transnacionales que monopolizan las Patentes. No hay que olvidar que hace poco, agentes extranjeros intentaron patentar el azúcar de la Panela, ¡como si ellos la produjeran con la tecnología de la Hoya del Río Súarez!

4- El Artículo 8J de la Convención habla de respetar el Conocimiento Tradicional que crean los pueblos y comunidades locales, ¿de qué utilidad ha sido, para apoyar a los pueblos étnicos y comunidades campesinas, en su resistencia a las empresas transnacionales?

La arremetida militar y paramilitar del poder capitalista supranacional no ha respetado derechos como la Consulta previa e informada, a la hora de saquear un territorio, mucho menos va a tener en cuenta a pueblos indígenas, campesinos y afrodescendientes; a estos últimos, ni siquiera los incluye la Convención.

5- La COP 26, ¿cuánto empodera a los pueblos y comunidades en la defensa de la vida y el territorio?

En tres secciones agrupan a los participantes de esta COP 26, la Azul donde están la ONU y los 194 países, la AMARILLA del país sede y la Verde nombrada como Iniciativas, para recoger allí a lo que surge desde abajo, en esta sección se inscribieron 14 mil Iniciativas, pero seleccionaron solo a 1.100, para hacer uso de la palabra un minuto cada una.

6- De esta maratón de discursos y de kilómetros de documentos de la COP 26, ¿cuánto es el impacto real para enfrentar el Cambio Climático?

En la comunidad de defensores del medio ambiente circula este aforismo: las COP son 90 por ciento retórica y 10 por ciento resultados; esencialmente resultan ser, foros de disputa de protagonismos y de dinero.

En el Lenguaje Común Acordado (LCA) de estos espacios multilaterales, cualquier persona queda obnubilada por el rompecabezas de siglas, con un propósito sombrío: volver complejo el problema del Cambio Climático para deducir que es irresoluble, que la causa no es del capitalismo, sino del ciudadano que recicla mal su basura, este es el nuevo Opio del pueblo. Veamos algunas siglas:

IPCC: Panel intergubernamental sobre Cambio Climático.

CMNUCC: Convención marco de las Naciones Unidas sobre Cambio Climático. En la que caracterizaron el daño terrible que producen los Gases de Efecto Invernadero (GEI).

CDB: Convención sobre diversidad biológica.

SFM: Convención sobre gestión forestal sostenible. En la que el país no incluye el Bosque Tropical Húmedo (BTH) -nombre técnico dado a la flora de las selvas-, que cubre más de la mitad del territorio solo en las cuencas de los ríos Orinoco y Amazonas.

RAMSAR. Convención sobre uso racional de humedales. En la que Colombia tiene inscritos solo 11 HUMEDALES por proteger, en un país rico en yacimientos de agua, que cuenta con el mayor número de páramos, amenazados por la extracción acelerada de minerales.

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[1] Michael Hudson. ¿Está EEUU al borde de una nueva crisis financiera? La Haine.org, 18-08-2024.

[2] Théories contemporaines de l’impérialisme. Benjamín Bürbaumer.

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